Hoy en día, es común que quienes ofrecen un inmueble en alquiler soliciten a su futuro inquilino que firme un contrato de arrendamiento con fiador. Es una forma de garantizar que los pagos de la renta serán efectuados sin falta en el momento acordado. Veamos en qué consiste este tipo de documento y cómo elaborar uno.
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![]() | Modelo de contrato |
¿Qué es un contrato de arrendamiento con fiador?
Un contrato de arrendamiento con fiador es un documento legal en el que el propietario de un inmueble autoriza a otra persona, el inquilino, para que disfrute de dicho inmueble a cambio del pago de una renta mensual, o alquiler, que será entregado al propietario por el propio inquilino o por su fiador o aval.
El negocio de alquilar viviendas está en auge, especialmente en las grandes zonas urbanas del país a donde miles de inmigrantes acuden cada año. Esto ha hecho que un mayor número de propietarios se enfrente a un problema relacionado con el alquiler de inmuebles: el impago de la renta.
Puesto que cada vez es más difícil hallar buenos inquilinos que sean responsables y confiables, los propietarios de inmuebles en alquiler tienden a exigir más requisitos a sus futuros inquilinos. Entre ellos destaca la presencia de un fiador o aval, alguien que se comprometa a pagar la renta en caso de que el arrendatario no pueda.
Modelo de contrato de arrendamiento con fiador
CONTRATO DE ARRENDAMIENTO CON FIADOR

Partes que intervienen en un contrato de arrendamiento con fiador
En un contrato de arrendamiento con fiador intervienen al menos tres elementos, cuyas funciones son las siguientes:
- El arrendador: o propietario del bien inmueble que, mediante un contrato de arrendamiento, ofrece en alquiler la totalidad o una parte de la propiedad a una persona, a cambio de un pago o renta mensual.
- El arrendatario: la persona a la que se le otorga el derecho de ocupar y disfrutar de una propiedad en calidad de inquilino y quien tendrá que pagar una renta o alquiler por el uso de esta.
- El fiador: también conocido como aval, que puede ser una persona física o moral, y quien responderá ante el arrendador en caso de que el inquilino no puede cumplir con su compromiso de pagar la renta por el alquiler del inmueble. También se compromete a pagar por los daños que el inquilino haga a la propiedad o si este abandona la propiedad sin previo aviso.
Información básica que debe incluir un contrato de arrendamiento con fiador
Todo contrato de arrendamiento con fiador debe incluir la siguiente información básica a fin de gozar de validez legal:
- Lugar y fecha de la firma del documento.
- Datos personales de los involucrados, es decir, Nombre y Apellidos completos, domicilio, teléfono, número de identificación y nacionalidad del arrendador, arrendatario y del fiador.
- Información del inmueble a rentar, lo que incluye la dirección de la vivienda, sus características, valor estimado, permiso de habitabilidad, etc.
- La duración del contrato de arrendamiento, con fecha de inicio y fecha de culminación, que suele ser de un periodo de 6 meses a 1 año.
- Valor y revisión de la renta, es decir, el precio del alquiler mensual, la forma y los medios de pago de esta y la disposición para revisar y aumentar el importe.
- Valor de la fianza o cantidad que el arrendatario debe entregar como depósito inicial al arrendador, que será devuelto al final del contrato.
- Cláusulas o disposiciones que expresen las obligaciones y responsabilidades del inquilino y su fiador.
Cláusulas que no pueden faltar en un contrato de arrendamiento con fiador
Las cláusulas o disposiciones son una parte fundamental en cualquier contrato de arrendamiento. Mediante ellas el propietario expresa las condiciones y responsabilidades que debe cumplir el futuro inquilino durante su estadía en la propiedad.
La Ley de Arrendamientos Urbanos permite la inclusión u omisión de cláusulas a voluntad de las partes, siempre y cuando estas no impliquen un abuso o violación de los derechos de cada uno. Las cláusulas que no pueden faltar en un contrato de arrendamiento con fiador son las siguientes:
- El pago de la renta en la fecha correspondiente.
- Todas las posibles causas para rescindir el contrato de arrendamiento, como el subarriendo o la ejecución de obras por parte del inquilino.
- Permitir el uso pacífico de la propiedad al inquilino sin suponer un estorbo para su tranquilidad.
- Definir con claridad para qué puede usarse el inmueble rentado y para qué no, por ejemplo, si está o no permitido tener animales de compañía.
- Establecer las condiciones en las que se encuentra el inmueble y las responsabilidades del inquilino para su mantenimiento y conservación.
- Responsabilidades y obligaciones del fiador.
Contrato de arrendamiento y el fiador
En los últimos años, se ha hecho muy común que los propietarios de inmuebles en renta soliciten a sus futuros inquilinos un fiador o aval. Esta figura puede desempeñarla una persona física o moral que tenga permitido otorgar fianzas, y es quien se compromete a responder por el inquilino en caso de incumplimiento de alguna de las obligaciones contraídas por éste en la firma del contrato.
Es bueno aclarar que, en un contrato de arrendamiento, el fiador es la parte más desprotegida puesto que asume las mismas responsabilidades del inquilino, pero sin disfrutar del inmueble rentado. Además, puede contraer serias deudas en caso de que el arrendatario le solicite el pago de la renta cuando el inquilino incumpla.
Igualmente, en el contrato de arrendamiento se indica con claridad lo que el arrendatario debe hacer en caso de impago, pero no suele especificarse qué debe hacer el fiador para reclamar su dinero al inquilino que no ha pagado. Todo esto pone al fiador en una posición riesgosa, por lo que debe asegurarse de que su fiado es una persona responsable y confiable.
Un recordatorio final frente a la firma de un contrato de arrendamiento con fiador
Antes de firmar un contrato de arrendamiento con fiador, es muy importante que las partes involucradas se aseguren de conocer bien la legislación vigente que aplica al caso. De esta forma, se disminuyen los riesgos de entrar en un acuerdo que genere más problemas que beneficios.