En ocasiones, las empresas necesitan de la asistencia de un profesional que sea especialista en una materia o rama determinada, a fin de mejorar su gestión e incrementar las ganancias o sus probabilidades de éxito. El acto de contratar a un especialista de este tipo se establece y regula mediante un contrato de consultoría empresarial.
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¿Qué es un contrato de consultoría empresarial?
Un contrato de consultaría empresarial es un documento mediante el cual una persona, natural o jurídica, contrata a un consultor o profesional especializado, a fin de que le proporcione consejos y guía confiable y efectiva en lo relacionado con la gestión de un negocio. El documento contiene los términos y condiciones bajo los cuales se regirán las partes.
En un contrato de consultoría intervienen dos figuras personales: el consultor, que puede ser tanto una empresa como un profesional independiente; y el contratante, que puede ser una persona física o moral, como una empresa, una asociación o una sociedad. A cambio de su servicio como consultor empresarial, el consultor recibe una contraprestación o pago.
Ejemplo de contrato de consultoría empresarial
CONTRAO DE CONSULTORÍA EMPRESARIAL
¿Cuál es la función del consultor dentro de una empresa?
Una vez que la empresa decide contratar los servicios de un consultor empresarial, su directiva debe prestar atención a la guía que el consultor les ofrezca, haciendo todo lo posible por aplicar sus sugerencias y apoyarlo en la toma de decisiones. Básicamente, la función de un consultor implica lo siguiente:
- Ayudar al cliente a identificar, de manera sistemática, los objetivos que a corto, mediano y largo plazo se han de establecer en torno a la gestión.
- Ayudar al cliente a identificar las ideas y puntos de vista que deben ser modificadas para mejorar la eficiencia de la empresa.
- Convencer al cliente de que la resistencia al cambio es el principal obstáculo para avanzar en la dirección y magnitud deseada.
- Comprometerse con la probabilidad de éxito de alcanzar las metas del cliente.
Tipos de consultorías
Las consultorías pueden ser de diferentes tipos y abarcar diversos temas o materias, entre las cuales destacan:
- Consultoría laboral, a fin de analizar, por ejemplo, los puestos de trabajo que pueden ser subcontratados para ahorrar dinero en impuestos y otras cargas.
- Consultoría legal, mediante la cual se ayuda al cliente a cumplir con los requisitos legales necesarios para montar un negocio o enfrentarse a un litigio.
- Consultoría financiera, a fin de proporcionar consejos efectivos para reducir los gastos y aumentar las ganancias en la gestión de un negocio.
Aspectos esenciales en un contrato de consultoría empresarial
Un aspecto de inclusión obligatoria en un contrato de consultoría empresarial consiste en establecer los objetivos a lograr y las condiciones en las que se llevará a cabo la consultoría. Por lo general, se trata de un proyecto concreto y de objetivos específicos que pueden tomar unos meses, varios años o prolongarse durante un periodo de tiempo indefinido.
Otro detalle importante es acordar el precio del servicio que el consultor ofrecerá, y la forma de pago que implementará el cliente. En cuanto a los plazos de pago, se puede acordar que el cliente haga el ingreso al momento de firmar el contrato, al concluir el mismo o posterior a la entrega del informe final de la empresa.
